25 de marzo de 2015

Una semana despues de egresar..

Bueno.. hoy es miércoles, y por alguna razón desconocida me acordé que tengo un blog, al que debí ponerle más atención.. y si.. es cierto que me ocupé muchísimo más después de aquel junio del 2014.. muchas cosas sucedieron.. pero al fin estoy fuera de la Universidad, lo que no significa que dejaré de seguir estudiando e investigando.. He tenido una idea revoloteando en la cabeza durante estos días en los que he pasado descansando y observando videos de una de mis mayores inspiraciones luego de Karlos Arguiñano y Julia Child, es nada mas y nada menos que Nigella Lawson.. ella tiene la facilidad de haber entrado en cada casa a través de la pantalla y de libros de cocina, que me ha hecho pensar en "que tal si me pongo a escribir un libro.." obviamente sería un libro de cocina.. algo que llame la atención y mucho, como aquel famoso y seductor libro de Isabel Allende, el famoso Afrodita, cuando mi madre lo compró y lo ví, lo tuve que agarrar y no paré de leerlo hasta terminar.. lo leía una y otra vez.. hasta cuando se lo presté (magnífico error, Gracias Bryan!!) a un amigo para que lo presentara como una tarea.. jamás lo volví a leer..
Creo que escribiría un libro sobre las vivencias que he tenido con la cocina que he probado de mi familia y con ella.. mi hermosa familia.. y no me refiero solamente a papá, mamá y hermanos, nooo.. para nada.. me refiero a mis abuelitos, tíos paternos y maternos, primos, sobrinos y etc.. somos muchos.. de parte y parte.
También debería escribir las anécdotas que me cuentan y de las cuales no me acuerdo.. deben haber sido traumáticas.. Escuela, colegio, casas de familia.. en fin..
En este mismo instante pienso si debería colocar alguna que otra receta.. hay muchas que sólo pertenecen a mi familia.. Un pollo con champiñones, un cerdo a la leche, una ensalada de pollo y lechuga, que evocan recuerdos de viajes hacia Loja o Cuenca y también me hacen recordar la hospitalidad de mi querida Tía María. Humitas,col en salsa de maní, empanadas, tigrillo y el rico locro de habas con arroz y zanahoria que sólo puede tener ese toque de amor de mi abuelita Esperanza. uy.. pensándolo bien creo que si debería colocar las más importantes.. Con las que recuerde más a cada uno de los chefs que hay en mi familia y que contribuyeron sin saber, a que la cocina sea uno de los pilares más importantes en mi vida.
Wow.. si que me he extendido en esta entrada pero así es.. como el hijo pródigo, vuelvo, y espero que con más y mejores fuerzas para continuar compartiendo lo que hice, hago y haré.





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